Vegana en el Camino 7- (O Pedrouzo/Santiago, 20 km)


"Peregrino es todo aquél que tiene un espíritu libre, un equipaje ligero, un alma solidaria, y sigue espontánemente el camino de sus sueños"
Anónimo


Fuente del plano: EROSKI CONSUMER







Me levanto muy animada, quedan los últimos kilómetros y tengo muchas ganas de llegar. Aunque el día esté nublado ( se agradece a la hora de caminar), las vistas desde mi habitación son una maravilla.

La jornada de hoy se presenta suave, según el plano, salvo la subida al Monte do Gozo, cuando llegue allí, sólo faltarán cuatro Km. para llegar al final del Camino.




Salgo del pueblo por la Rúa do Concello, camino algo así como medio kilómetro por la carretera y entonces, el Camino sigue por un bosque de robles y eucaliptos (sobre todo), todavía hace algo de frío, pero el peso de la mochila, hace que ya vaya sudando.




Llego entonces al río Brandelos ...



...y al pasarlo continuo entre árboles por una pista asfaltada que cruza la carretera nacional (N-547) por un túnel. Empieza una subida que por momentos es llevadera y en otros, no tanto.

Sigo caminando hasta encontrar una rotonda en la que se unen las carreteras N-547, N-634 y la autovia Santiago/Lugo (A-54).



Un monolito con la vieira, la calabaza y el bordón me da la bienvenida al Concello de Santiago.



Rodeando el perímetro del aeropuerto y por una carretera secundaria entro en la aldea de San Paio, con su Iglesia.




Dos kilometros más, encuentro otra iglesia, la de San Pelayo de Sabugueira, (1840), ya en Lavacolla. Sobre la puerta, una inscripción nos informa de quien fue la persona que pagó su construcción. A su lado hay un curioso cementerio, todo de color gris.




Un poco más adelante, cruzo el río Sionlla, conocido como el arroyo de Lavacolla, lugar donde antiguamente los peregrinos se despojaban de sus sucias ropas y se lavaban y preparaban para su entrada en Santiago.



Subo ligeramente por una pista asfaltada, pasando por San Marcos, hasta llegar al Monte do Gozo.



En la cima, hay una escultura conmemorativa de la visita del Papa Juan Pablo II (Año Santo Xacobeo 1993). Desde aquí, parece ser, que hay una amplia vista de la ciudad de Santiago y de su catedral, yo no vi nada, todo estaba cubierto de niebla.



Reanudo el camino y por fin, pasando un puente sobre la autovía llego a Santiago. Me recibe la escultura del Templario Peregrino, (autor: Santiago de Santiago 1999), ubicada en el Puente de San Lázaro y dedicada al caballero templario de la Orden de Santiago, protector de los peregrinos.



También encuentro una especie de mural, con el nombre de la ciudad, en la que los caminantes han ido dejando alguna pertenencia a modo de collage.






Todavía hay una buena caminata hasta llegar a la Plaza del Obradoiro, o al menos eso me parece, porque cuantas más ganas tengo de llegar, más tardo en hacerlo. Casi no hice fotos de los monumentos de Santiago, eso merece un capítulo completo, además todos mis ánimos están en llegar a la Catedral.





Y por fin, aquí estoy, rodeada de peregrinos y de caminantes, todos estamos emocionados por el momento que vivimos y es que es complicado no emocionarse, hacer el Camino de Santiago es una experiencia única y que además engancha. Para mi es la segunda vez y sentí lo mismo que en la anterior, unas ganas enormes de volver, de planificar mi próxima ruta hasta Santiago de Compostela… o quizás hasta el Monte Pindo, en Carnota (Costa da Morte), donde terminaban el camino nuestros antepasados, antes de la llegada del cristianismo.






Hay bastantes sitios para que un vegano pueda comer en Santiago, me hablaron muy bien de un restaurante: “Entre Pedras”, pero estaba cerrado, parece ser que abre a partir de las 19h. Usando Google, encontré el restaurante Rua, que tiene opciones vegetarianas y veganas.

Restaurante RúaRúa de San Pedro, 24, Santiago de Compostela



Hacer el Camino fue mucho más que ir a Santiago, fue una ruta hacia el interior, pensar en mi vida y en los que ya no están a mi lado, saber que si me lo propongo, es posible.
Y que los obstáculos, sólo son inconvenientes, que se vencen fácilmente con la constancia y la voluntad de llegar.

a todos, BUEN CAMINO!!!!


Comentarios

  1. Hola aunque solo te voy a publicar en esta entrada las he leído todas. ya que soy vegano y voy hacer el camino, y este blog me va a ayudar muchisimo. Gracias por tomarte tantas molestias en escribir las opciones veganas de cada sitio! Buen camino!

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    1. Gracias por tu comentario Salvador, seguro que hay alguna que otra opción más (ojalá). Deseo que para ti sea tan gratificante hacer el Camino como lo ha sido para mi. Buen camino!

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